La técnica se basa en objetos de tamaño o forma original conocida. Estos objetos se denominan marcadores de strain. La mayoría de estos marcadores cae dentro de una de las siguientes categorías.
En un campo de strain homogéneo los marcadores inicialmente circulares serán deformados en elipses, las que aparecerán en cualquier superficie cortando la roca deformada. Los ejes mayores de las elipses serán paralelos incluso para valores muy bajos de strain con los ejes de la elipse de strain.
Las elipses representan el estado de strain en la superficie de interés
específica (la que vemos). La razón entre las extensiones máxima y
mínima pueden obtenerse midiendo y comparando los ejes de cualquier
elipse. Lo más usual es medir un número de elipses y plotear los ejes
mayores v/s los menores. La pendiente de la línea que representa
mejor una relación lineal
(tan) es la razón entre el eje mayor
y el eje menor y por lo tanto, corresponde a la razón entre los strain
máximos y mínimos. Si se sabe que la deformación no involucró
cambio de área, los valores reales de los strains principales pueden ser
determinados midiendo el área de la elipse y determinando el diámetro de
la circunferencia con área equivalente. El radio de esta circunferencia
será el largo inicial y los largos finales corresponderán a los largos de
los ejes de la elipse de strain. La extensión se puede determinar:
En el caso anterior, todas las elipses tenían ejes máximo y mínimo paralelos entre sí y paralelos a los ejes de la elipse de strain. Cuando los marcadores son elípticos esto no se cumple, a menos que el eje mayor de la elipse no deformada coincida con la extensión principal.
Generalmente existirá un ángulo entre el eje mayor de la elipse de
strain (extensión principal) y el eje mayor de la elipse deformada
(partícula). Este ángulo se conoce como fluctuación y tiende a
decrecer con un aumento de strain (a mayor deformación, las orientaciones
tienden a ser paralelas).
El problema de determinar el strain de partículas originalmente
elípticas se observa en (c); una partícula originalmente
elíptica con una razón axial igual a
R0 = ,
inclinada a un ángulo
de la dirección de máxima extensión.
La elipse de strain tiene una razón Rs entre sus ejes.
El resultado de la deformación es una partícula elíptica, de
razón axial Rf, inclinada a un ángulo de la dirección de
extensión máxima.
El problema radica en determinar R0 y Rs a partir del estado deformado Rf.
En la figura anterior (b) se puede ver que la forma final Rf depende de la orientación relativa de la partícula original y del strain aplicado. Cuando ellos interfieren constructivamente (i), la elipse resultante tiene la mayor excentricidad y cuando ellos interfieren destructivamente (ii), la elipse tiene la menor excentricidad.
Entonces, cuando una elipse con elipticidad R0 es deformada homogéneamente, la forma resultante es también elíptica. La forma de esta elipse final Rf, es función de cuatro factores:
La figura siguiente muestra una superficie que contiene un número de
partículas elípticas de forma constante R0 = 2, orientada a
distintos ángulos de un marcador inicial de dirección paralela al eje
x ( = 900,
= 750,
= 600, 450, 300,50 y 0). El gráfico muestra R0 = constante
v/s
.
Cuando se superpone un strain homogéneo (B), con elipse de razón
Rs = 1, 5, entonces las elipses iniciales cambian dependiendo de la
orientación con respecto a la orientación de los ejes de la elipse de
strain. La orientación de las elipses también cambia (), excepto
para
= 900 y
= 0. Los ejes mayores de las elipses
tenderán a ubicarse paralelos al eje mayor de la elipse de strain.
La elipse inicial que tiene eje mayor paralelo a la elongación principal
máxima
( = 0) tomará una nueva forma que será más
elíptica que la elipse de strain. Mientras que la elipse inicial ubicada
a
= 900 se volverá menos elíptica que la elipse de strain.
Las elipticidades Rf de todos los otros marcadores elípticos se encuentran entre ambos valores, pero la mayoría tendrá elipticidad mayor que la elipse de strain.
Si tomáramos para el análisis el promedio aritmético de las elipses
De estudios geométricos se obtiene las siguientes relaciones, si R0 > I>Rs:
Rfmax | = | Rs R0max | ![]() |
![]() |
= | R0max |
Rfmin | = | ![]() |
![]() |
![]() |
= | Rs. |
Entonces, para determinar el strain Rs y la forma original R0 es necesario establecer Rfmin y Rfmax y resolver las ecuaciones.
Para hacer esto, se puede tomar una cara (o fotografía de una cara) que
contenga los marcadores de strain elípticos. Se mide la razón Rf de
cada elipse,
Rf = y la
orientación
= ángulo entre la línea dato y la dirección de
extensión principal. (Son las fluctuaciones).
Las fluctuaciones de cualquier elipse pueden ser obtenidas del gráfico, midiendo el ángulo entre la línea de simetría y el punto en la curva que representa la elipse deformada.
Determinando valores Rfmax y Rfmin (puntos 2 y 1 del gráfico) se determina posteriormente los valores de R0 y Rs.
Si la magnitud de la forma original R0 es mayor que el strain aplicado Rs, entonces los datos no forman una curva cerrada sino una curva en forma de campana.
(En este ejemplo las fluctuaciones máximas son de 1800.) Se ha asumido, además, que las partículas originales tienen la misma forma original R0. En la práctica esto no es común, sino que hay un rango para R0. En este caso se obtendrá una curva cerrada para cada valor R0 o rangos entre R0.
Se puede utilizar entonces para determinar el rango de variación de R0.
Por otra parte, del gráfico
Rf v/s puede ser detectada la
existencia de orientaciones preferenciales de las partículas no
deformadas. Las orientaciones preferenciales tienden a formar gráficos
Rf v/s
asimétricos.
En general, la simetría bilateral que tienen algunos fósiles es destruida durante la deformación, a no ser que el eje de simetría coincida con una de las direcciones principales de strain.
La relación original del ángulo recto se pierde y el cambio en ángulo
da una medida del cizalle angular () y por lo tanto, se puede
determinar el strain de cizalle que sufrieron las líneas A y B,
originalmente perpendiculares.
Los valores de en esas dos direcciones tienen la misma magnitud, pero
signo opuesto.
A diferencia de los marcadores ya discutidos, los belemnites no tienen las mismas propiedades que la matriz rocosa. Se asume que ellos tienen un comportamiento frágil durante la deformación y que los segmentos no cambian de largo. Si esto es verdad, la suma de los fragmentos da el largo originall lo; el largo final se obtiene directamente midiendo su largo l en la roca deformada. Con estos datos se obtiene la extensión en distintas direcciones.