Plan de Acción de la Reforma Urbana y Territorial

Descargado de la página web del Ministerio de Vivienda y Urbanismo, www.minvu.cl.

Antecedentes

El Gobierno del Presidente Lagos ha fijado como una de sus prioridades el desarrollo de las ciudades chilenas. En este contexto el ex Ministro SR. Claudio Orrego convocó el Grupo de Trabajo para la Reforma de la Ciudad (GTRC). Este grupo, en el cual participaron más de 80 profesionales y representantes de las más diversas instituciones preocupadas del desarrollo urbano y territorial, trabajó durante seis meses (octubre 2000 - marzo 2001) en la elaboración de recomendaciones y propuestas de acción para definir la nueva política urbana. Entre abril y junio del presente año, se trabajó en ordenar la propuesta definitiva de la Reforma Urbana (documento que se muestra a continuación). El día 25 de junio, el Presidente de la República, anunció oficialmente la Reforma Urbana situándola en el centro de la agenda para el desarrollo del país.

 

I. Introducción

Durante las últimas décadas la sociedad chilena ha hecho un enorme esfuerzo por resolver una gran cantidad de demandas sociales y aunque el desarrollo económico ha mejorado las condiciones de vida de muchas personas, se acrecienta un estado de insatisfacción con las ciudades que habitamos.

En su discurso del pasado 21 de mayo el Presidente de la República nos invitaba por primera vez en la historia a poner nuestras ciudades en el centro de la agenda para el desarrollo del país. "Duele decirlo, pero no estamos orgullosos de nuestras ciudades. Tenemos ciudades hermosas pero las hemos contaminado, descuidado e incluso convertido en laberintos de congestión que parecen ahogarnos", decía el Presidente, llamándonos a hacer un "tremendo esfuerzo para llegar al Bicentenario con ciudades más bellas, menos contaminadas, más expeditas, dignas, amables y cultas"

Para alcanzar este gran desafío se hace necesario hacer cambios radicales en el enfoque con que hemos abordado el desarrollo urbano y territorial en el pasado, superando debates paralizantes y transformando en una nueva política el creciente consenso en torno al rol central que las ciudades juegan en el desarrollo del país.

Para todos los chilenos se hace cada día más evidente que las transformaciones en la economía global, los mercados laborales, la expansión de las comunicaciones y los rápidos cambios sociales y culturales en los cuales estamos inmersos, están transformado vertiginosamente las ciudades y territorios que habitamos. En las próximas décadas, nos veremos enfrentados a radicales cambios en nuestras urbes producto a estas transformaciones, cambios que acentuarán la importancia de las ciudades en la generación de oportunidades de desarrollo y bienestar. Estas transformaciones nos enfrentan al enorme desafío de preparar nuestras ciudades para estos cambios y transformar nuestros sistemas urbanos en los instrumentos que permitirán a Chile alcanzar su desarrollo pleno en la próxima década.

Con más del 85% de los chilenos viviendo en ciudades y dependiendo de ellas, este desafío ya es visto por la mayoría como un tema pendiente del país, asentándose un creciente consenso en la necesidad de iniciar un fuerte proceso de reforma del modo como construimos, usamos y gobernamos nuestras ciudades. En este espíritu y por instrucción de S.E. el Presidente de la República, en septiembre del año 2000 el Ministerio de Vivienda y Urbanismo y a otros servicios vinculados al tema urbano crearon del Grupo de Trabajo para la Reforma Urbana (GTRU).

La misión del GTRU ha sido identificar los temas claves del desarrollo urbano y territorial de Chile para las próximas décadas, definir los lineamientos principales para una nueva Política Urbana Nacional y generar propuestas concretas para mejorar la situación existente.

 

II. Grupo de Trabajo para la Reforma urbana

El GTRC, en el cual han participado más de 80 profesionales y representantes de las más diversas instituciones preocupadas del desarrollo urbano y territorial, trabajó durante seis meses en la elaboración de recomendaciones y propuestas de acción para definir la nueva política urbana, la cual ha sido denominada como la REFORMA DE LA CIUDAD. Esta reforma ha sido definida no tan sólo como un mero esfuerzo de mejoramiento físico y funcional de nuestras ciudades, sino como una radical transformación de los procesos de desarrollo y gestión de nuestros sistemas urbanos.

El trabajo de la GTRC, encabezado por el Ex Ministro de Obras Pública Señor Carlos Hurtado y coordinado por una secretaría ejecutiva del MINVU, se organizó en una primera etapa en cuatro subgrupos de trabajo, los cuales trabajaron entre los meses de Octubre y Enero en la formulación de recomendaciones y propuestas para abordar cuatro temáticas:

  1. Movilización de Recursos y Financiamiento para el Desarrollo Urbano. Este subgrupo trabajó en la elaboración recomendaciones y propuestas para la creación de nuevos mecanismos de generación de recursos para el desarrollo urbano, ya sean provenientes de nuevas formas de financiamiento público, como de aportes privados. El subgrupo fue coordinado por el Ex Ministro de Vivienda y Urbanismo Edmundo Hermosilla y el empresario Sebastián Piñera.
  2. Uso de suelos, Equipamiento y Vivienda. Este subgrupo se concentró en el desarrollo de nuevas propuestas gestión urbana tendientes a una mayor integración entre las políticas de usos del suelo y las inversiones del estado en vivienda, equipamiento y transporte. Este subgrupo fue coordinado inicialmente por Jaime Ravinet en su calidad de Alcalde de Santiago y Vicente Domínguez, presidente de la Asociación de Empresas Inmobiliarias.
  3. Instrumentos de Planificación y Gestión Urbana y Territorial. Este subgrupo formuló recomendaciones y propuestas para mejorar y modernizar la aplicación y uso de los Instrumentos de Planificación Territorial (IPT) en el ordenamiento urbano y territorial y de algunas herramientas de gestión urbana asociadas a dichos instrumentos. El subgrupo fue coordinado por el Intendente de Santiago Sergio Galilea y el arquitecto-planificador urbano Pablo Jordán.
  4. Participación, Espacios Públicos y Cultura. Este subgrupo trabajó en torno a propuestas orientadas a la generación de ciudades más eficientes en los ámbitos económico, social y ambiental, a partir de la relación entre ciudadanía, los espacios públicos y el patrimonio. Fue coordinado por la Subsecretaria de Vivienda y Urbanismo Sonia Tschorne y Alfredo Rodríguez, Director Ejecutivo de SUR Profesionales.

El trabajo realizado por estos subgrupos se tradujo en cuatro Resúmenes Ejecutivos y más de 40 documentos temáticos, los cuales fueron sistematizados en un conjunto de propuestas y recomendaciones.

 

III. Siete Consideraciones Generales

La Reforma de la Ciudad surge en gran parte como un esfuerzo de modernización y adaptación de nuestras políticas urbanas a los cambios y realidad contemporánea. Gran parte de las recomendaciones aquí contenidas se fundan en cinco consideraciones previas de la realidad urbana actual. Estas son:

  1. El desarrollo urbano juega un rol clave el sistema democrático. Es uno de los aspectos más relevantes de la relación entre las personas y sus gobiernos. Ante la existencia de más de 180 ciudades y pueblos, los cuales presentan una enorme diversidad de realidades, desde áreas metropolitanas a pequeñas ciudades de no más 2.500 habitantes, es de creciente consenso nacional la necesidad de descentralizar el Estado y dotar a los gobiernos locales de mayores atribuciones y autonomía, involucrando a la gente con su desarrollo y fortaleciendo el sistema democrático. Por otro lado, el espacio local es donde se manifiesta de mejor manera la relación entre la ciudadanía y la ejecución de las políticas públicas, las cuales dependen de manera crítica de la capacidad gestión local y la participación activa de la comunidad en su implementación. Hoy más del 40% del gasto público es de decisión regional, siendo la meta del gobierno sobrepasar el 50 %, no obstante menos del 20% del gasto total del Estado sigue siendo gestionado por municipios, los cuales carecen de atribuciones legales para tomar decisiones en muchos ámbitos del desarrollo urbano y la administración local.
  2. El desarrollo urbano es dinámico y diverso. Las ciudades se encuentran en permanente estado de ajuste, lo que obliga a políticas flexibles y adaptables. Los actuales procesos de desarrollo urbano están sujetos a infinitas decisiones que toman las personas, las empresas y el Estado sobre el territorio, decisiones sujetas a constantes cambios en los procesos demográficos y económicos, en las tendencias de mercado y en los hábitos y estilos de vida. Esta condición cambiante de la realidad urbana hace indispensable regulaciones y planes de gran flexibilidad y adaptación a las nuevas demandas, asegurando armonizar las decisiones individuales con la eficiencia económica, la equidad social y la protección del medio ambiente. El éxito de la política urbana depende de un modo crítico más de los instrumentos que permitan a los distintos actores asumir las externalidades negativas causadas por sus decisiones que de acción directa del Estado.
  3. Las políticas urbanas tienen significativos efectos económicos y sociales. El desarrollo urbano puede traer enorme beneficios y oportunidades de desarrollo a la gente, ya que estas afectan la capacidad y competitividad del País. Hoy el 86% de la población chilena vive en ciudades y cerca del 84% de los empleos se generan en ellas. En tan sólo diez años el PIB generado por las zonas urbanas ha aumentado de un 75% a más del 86%. Por otro lado, aproximadamente 2/3 partes de la riqueza física (capital físico + recursos naturales) está en nuestras ciudades y el valor de esta riqueza alcanza valores cercanos a 3 veces el PGB, es decir unos US$ 240 billones, de esta manera, cuando se interviene sobre el sistema urbano se modifica espacialmente la riqueza con un violento impacto en la distribución del ingreso y de las oportunidades de desarrollo de cada Comuna o Región. Estos cambios acentúan aún más el rol de las ciudades en el desarrollo económico y social y hacen necesario entender a las políticas urbanas también como políticas sociales y económicas.
  4. La integración entre ciudad y territorio constituye uno de los cambios paradigmáticos del desarrollo urbano contemporáneo. Las nuevas urbes de hoy y mañana son la suma de diversa comunidades a lo largo del territorio. Este panorama se hace aún más evidente en los extremos de los sistemas urbanos, en las áreas metropolitanas en proceso de transformación de regiones metropolitanas y en las regiones rurales compuestas por vastos sistemas de ciudades menores y pueblos integrados social y económicamente con sus territorios.
  5. El Estado juega un rol central en el Desarrollo Urbano. Dada la complejidad de los sistemas urbanos, los distintos niveles del Estado cumplen un rol central en la promoción del bien común y la gestión de las ciudades. Si bien el Estado ha ido cambiando en el tiempo su rol al interior de los sistemas urbanos, transitando desde un Estado Empresario a un Estado Regulador y Promotor, tanto los cambiantes y dinámicos mercados urbanos como los conflictos sociales generados al interior de las ciudades hacen imprescindible la acción concertada y decidida del Estado como ente responsable de la adecuada gestión y regulación de nuestras urbes. De esta manera, en el presente escenario de globalización y creciente acción privada es responsabilidad del Estado diseñar, implementar y gestionar las políticas urbanas.
  6. Al mercado y la iniciativa privada le cabe una alta responsabilidad en el desarrollo urbano. Esto se hace evidente en el fuerte cambio experimentado en la participación del sector privado sobre el total edificado en las ciudades, pasando de un 23% en 1980 a un 81% en 1997. Estos cambios en la capacidad de la iniciativa privada de actuar sobre los procesos urbanos dando respuesta a las nuevas demandas, innovando en la oferta de productos y servicios y creando nuevas tendencias de desarrollo, implica un marcado cambio respecto a las ciudades de hace 40 años atrás. Esta transformación obliga ampliar los espacios de trabajo público-privado en el desarrollo urbano, diseñando políticas urbanas que permitan el buen funcionamiento de los mercados urbanos y la expansión de las oportunidades de participación privada.
  7. El Estado carece hoy de una adecuada estructura para enfrentar la gestión del desarrollo urbano. A pesar de los cambios vividos por nuestras ciudades, la estructura del Estado para responder a la gestión de los procesos urbanos no ha variado significativamente en los últimos 35 años. Aún subsiste una alta dispersión administrativa de funciones, existiendo más diez instituciones del Estado con atribuciones directas sobre distintos aspectos del desarrollo urbano. A lo anterior se debe sumar la falta de autonomía local y regional para dirigir el desarrollo urbano y un creciente aumento de conflictos de competencia entre ministerios, servicios y gobiernos locales debido a la superposición de leyes y decretos. Respecto a la asignación de los recursos públicos, la operación de las ciudades no se encuentra adecuadamente explicitado en la forma en que se analiza y asigna el gasto público, generando enormes ineficiencias por descoordinación, superposición y falta de integración de las inversiones sectoriales en las ciudades.

 

VI. Seis Principios para la Reforma urbana y territorial

En el contexto anterior, la modernización y la reforma de las ciudades esta orientada a construir asentamientos humanos más integrados y solidarios, poniendo como eje de las nuevas políticas a la persona y la familia. Este desafío se funda en los siguientes principios.

DEMOCRACIA DE LA CIUDAD

Aspiramos a una ciudad construida sobre la participación, la concertación de esfuerzos y la apertura a la iniciativa de la gente y sus comunidades, entregando crecientes grados de autonomía local y regional para el desarrollo urbano.

DIVERSIDAD DEL SISTEMA URBANO Y TERRITORIAL

Aspiramos a un sistema urbano y territorial que ofrezca el mayor número de posibilidades para sus habitantes desde el punto de vista de la residencia, el empleo, la recreación, el transporte, etc. Un sistema urbano y territorial que cuente con una variedad de instrumentos y líneas de acción para diferentes temas, problemas y contextos, que reconozca las identidades y particularidades del territorio, asumiéndolas como condiciones para la gestión del desarrollo urbano local y que recoja la particularidad local mediante la incorporación activa de la población: de forma participativa.

LA CIUDAD SUSTENTABLE AMBIENTALMENTE

Aspiramos a un sistema urbano y territorial que se desarrolle sin afectar la calidad de vida y el desarrollo futuro de sus habitantes. Las políticas e instrumentos de desarrollo urbano deben fomentar formas de desarrollo de bajo impacto ambiental.

INTEGRALIDAD DE La GESTIÓN URBANA

Aspiramos a un sistema urbano y territorial integrador e integral:

Integral en relación con las políticas públicas: La ciudad es un espacio de convergencia de las políticas públicas, lo que implica el potencial de articular las políticas sectoriales en y desde la ciudad. Las políticas y programas sociales y sectoriales tienen una dimensión espacial y urbana que debiera formar parte de la gestión urbana.

Integrador en la dimensión social, de manera que contribuya a la integración socio-espacial de todos los grupos de nuestra sociedad. Integrador a nivel físico, de manera que la ciudad y su proceso de gestión incorpore distintas escalas. Integrador en términos de usos y funciones. La ciudad se caracteriza por su heterogeneidad funcional.

UNA GESTIÓN URBANA FlexibLE

Aspiramos a mecanismos e instrumentos de gestión urbana flexibles, que a partir de la definición de objetivos y condiciones esperadas para el desarrollo urbano y territorial, puedan adaptarse a las particularidades y potenciales de cada caso. El rol del Estado, en este sentido, se incrementa por sobre el de la administración de servicios, control normativo e inversiones básicas, hacia el de la promoción incluyendo las acciones de informar, orientar, facilitar, negociar incluso, el desarrollo urbano. Ser más un gestor que un administrador.

Efectividad EN LA ADMINISTRACIÓN Y GESTIÓN URBANA:

Aspiramos a sistemas urbanos y territoriales gestionados de forma eficaz y eficiente. Este principio de debe traducir en una modernización de los mecanismo de gestión urbana del sector público.

La eficacia de las políticas públicas en los temas de la Reforma de la Ciudad dicen relación con el sentido de oportunidad en la acción, con la concepción estratégica de las inversiones, con la promoción de la articulación entre actores y agentes del desarrollo urbano, con la superación de la rigidez a favor de alcanzar los objetivos propuestos.

La eficiencia apunta a la optimización del uso de los recursos, a la movilización proactiva de la comunidad en la gestión de la ciudad, a la creatividad para la reducción de los costos de producción y operación del sistema urbano, a la disposición de información para la toma de decisiones, y a la coordinación de las políticas públicas.

 

V.- Plan de Acción para la Reforma

Líneas de acción para la Reforma de la Ciudad.

La Reforma de la Ciudad implicará un esfuerzo del Estado en diversos ámbitos de acción. El éxito de este esfuerzo dependerá en gran medida no sólo la voluntad política y la concertación de la ciudadanía en torno a este desafío, sino de la implementación sistemática y sostenida en el tiempo de un conjunto de acciones. Desde esta perspectiva, la Reforma de la Ciudad exige un esfuerzo considerable de planificación, con metas claras en su alcance, dinámica de implementación y recursos asignados, de coordinación de las agencias responsables y de control sistemático de resultados al más alto nivel de responsabilidad.

Las líneas de Acción aquí expuestas, representan un primer esfuerzo de sistematización y priorización de las recomendaciones y propuestas elaboradas por el Grupo de Trabajo para la Reforma de la Ciudad. Estas propuestas se encuentran contenidas en el documento "Bases para la Reforma de la Ciudad y Territorio", el cual se centra en las recomendaciones para abordar los distintas dimensiones del tema urbano, y en el documento "Propuestas para la Reforma de la Ciudad" que presenta más de 95 propuestas específicas.

Las cinco líneas de acción para la materialización de la Reforma son:

Desarrollo Institucional

Corresponde al grupo de recomendaciones y acciones propuestas para la adecuación de las instituciones a cargo del desarrollo urbano y territorial de Chile, para responder a los desafíos planteados por la Reforma.

Gestión del desarrollo urbano y territorial.

Corresponde al grupo de acciones propuestas para mejorar y posibilitar el manejo y gestión del proceso de desarrollo urbano por parte del sector público.

Financiamiento del Desarrollo Urbano y Territorial

Corresponde al grupo de recomendaciones y acciones orientadas a ampliar y mejorar la disponibilidad de recursos financieros para el desarrollo urbano.

Manejo Ambiental Urbano

Corresponde al grupo de recomendaciones y propuestas orientadas a dar expresión al principio de la sustentabilidad ambiental del desarrollo urbano y territorial.

Fortalecimiento de la Participación y la Ciudadanía

Corresponde al grupo de recomendaciones y propuestas orientadas a incorporar la participación de la ciudadanía en la identificación de necesidades, formulación de propuestas e iniciativas, y, ejecución, mantención y control del desarrollo urbano.

El siguiente cuadro muestra, a partir de las líneas de acción anteriores, las recomendaciones, las acciones vinculadas a cada recomendación surgidas del "Grupo de Trabajo para la Reforma Urbana" .

Todas las recomendaciones presentadas en este cuadro deben ser evaluadas y transformadas en acciones de política pública en el corto plazo, dependiendo su concreción de las prioridades que el Estado deberá fijar y la naturaleza de cada una de ellas. Será el "Plan de Reforma Urbana" sugerido en la parte VI de este documento el que deberá diseñar un cronograma detallado para la ejecución de estas acciones, razón por la cual en este cuadro no se distingue por ahora las medidas según su factibilidad de ejecución en el tiempo.


CUADRO 1: RECOMENDACIONES Y ACCIONES
NOTA: el listado de recomendaciones y acciones aquí contenidas sólo representa las propuestas emanadas de los iembros del GTRU, por tal estas deben ser evaluadas en una siguiente etapa de trabajo por el Estado.

Recomendaciones

Acciones

1. DESARROLLO INSTITUCIONAL

1. Reestructurar los roles, funciones, atribuciones y áreas que abarcan los distintos organismos que intervienen en la planificación urbana.

  • Hacer una evaluación y balance de los roles, funciones, atribuciones y áreas que abarcan los distintos organismos que intervienen en la planificación urbana. A partir de esa información, determinar qué organismos se podrían eliminar, redefinir, perfeccionar o fusionar, si fuese necesario.
  • Adecuar la Ley que regula el funcionamiento y las atribuciones de las instituciones y organismos involucrados en el desarrollo urbano.
  • Re ordenamiento de Secretarías de Estado. Sugerencias.: Sub Secretaría de Desarrollo Urbano y Ministerio del Territorio.
  • Fusionar definitivamente el Ministerio de Bienes Nacionales con el de Vivienda y Urbanismo, transfiriendo sus funciones operativas a los SERVIU y a una Subsecretaría de Urbanismo al interior del MINVU, integrando los bienes del Estado a las políticas públicas en Desarrollo Urbano.
  • Re – ordenamiento de las Secretarías de Estado relacionadas con el espacio público.
  • Creación de un sistema de contratación profesional vinculante con los cargos a desempeñar.
  • Definir un sistema de selección de postulantes a cargos públicos que asegure perfiles profesionales mínimos ad-hoc al cargo.

2. Avanzar en la incorporación de mecanismos de planificación estratégica que impriman su carácter integral a las decisiones territoriales.

  • Crear Unidades Estratégicas de Gestión Urbana a nivel regional que integren las áreas de desarrollo urbano y transporte.
  • Diseño de una metodología de planificación estratégica aplicable a la gestión de los organismos públicos implicados en el desarrollo urbano.

3. Fortalecer la autonomía y liderazgo local.

  • Apoyar la gestión y capacitación de organizaciones sociales vecinales.
  • Crear las direcciones de urbanismo al interior de los municipios.
  • Entregar mayor flexibilidad y autonomía a las autoridades locales con respecto a la definición e implementación de sus IPT.

4. Fortalecer la gestión territorial y urbana sobre la base de instituciones intermedias para el desarrollo urbano de unidades territoriales específicas.

  • Crear el soporte legal para entregar atribuciones reales sobre el territorio a estas instituciones. Bajo esta categoría estarían todas las agrupaciones representantes de la sociedad civil que conforman el tercer sector, Corporaciones municipales, asociaciones público – privadas, corporaciones asociadas a elementos geográficos como bordes costeros y riveras de río, fundaciones que trabajan una temática determinada como Paz Ciudadana, que se centra en el tema de la Seguridad, etc., y también instituciones públicas temáticas del tipo de las "Autoridades" del sistema norteamericano (Metropolitan Transport Authority, Housing Authority, etc.).

2. GESTIÓN DEL DESARROLLO URBANO Y TERRITORIAL

2.1 POLITICAS

5. Desarrollar políticas y planes de desarrollo territorial que incorporen integralmente los territorios urbano y rural.

  • Perfeccionar planes regionales de desarrollo urbano (carácter legal, la utilidad y contenidos)

6. ntroducir el concepto de planificación estratégica para el desarrollo urbano.

  • Generar mmetodologías de planificación estratégica que permitan manejar planes de desarrollo urbano integrales.

7. Crear políticas modernas de manejo de la expansión urbana.

  • Actualizar los planes reguladores evaluando periódicamente las demandas por suelo urbano.
  • Incorporar a los planes nuevos mecanismos flexibles para el crecimiento urbano (Ej. ZODUCs, Areas Prioritarias de Desarrollo, Licitaciones de Areas de Expansión, etc.)

8. Incorporar a las políticas urbanas las tendencias de localización y operación industrial y de servicios.

  • Diseñar mecanismos flexibles de localización industrial sujetos a performance ambiental.

9. Considerar las nuevas tendencias de concentración de actividades regionales generadas por las redes de transporte.

  • Flexibilizar y corregir los instrumentos de usos del suelo en las áreas de influencia de las infraestructuras de transporte regional.

10. Asociar las políticas habitacionales del Estado al aumento de la movilidad de la población, el reciclaje urbano, el aprovechamiento de los espacios disponibles y las capacidades urbanas en desuso.

  • Avanzar en la modificación de la Política Habitacional.

11. La planificación del desarrollo territorial y urbano debe integrarse a la adecuada planificación de los sistemas y las infraestructuras transportes.

  • Planificar la red de transporte en todo el territorio.

12. Se debe propender a la integración de distintos modos de transporte

  • Implementación de centros de cambio de medio de transporte

13. Se debe integrar la vialidad local y residencial a la planificación de la ciudad.

  • Crear diseños para la seguridad y estímulo a otros modos de transporte como el peatonal y la bicicleta

14. Mantener la vitalidad y competitividad de las áreas centrales. Planificar y priorizar proyectos urbanos que apunten al desarrollo y fortalecimiento de centros urbanos.

  • Planificar y priorizar los proyectos de inversión pública en áreas centrales.

15. Fomento a los mecanismos de desarrollo urbano basados en Internalización de impactos.

  • Perfeccionamiento de los mecanismos de Zonas de Desarrollo Condicionado.
  • Incorporación de mecanismos de pagos por impactos.

2.11. PROGRAMAS

16. Reciclar el patrimonio construido.

  • Fomentar actividades comerciales, culturales y artísticas en terrenos o edificaciones en desuso.
  • Diseño de fondos concursables para el mejoramiento de barrios.

17. Fortalecer el desarrollo de los pueblos y pequeñas localidades.

  • Programas de pavimentación de caminos de ingreso a pequeños poblados.

18. Mejoramiento de los espacios públicos

  • Creación de la Corporación Nacional de Espacio Público.
  • Preparar anualmente una "Estrategia de Espacio Públicos" que trate temas de gestión, diseño, provisión, mantenimiento y financiamiento.
  • Convocar a concurso de "mejores practicas" para replicación y difusión de experiencias exitosas en gestión y uso de espacios públicos.
  • Fomentar la celebración de fiestas, concursos, exposiciones y todo tipo de actividad que genere la animación y participación ciudadana en los espacios públicos.
  • Crear fondos concursables a nivel municipal para habilitar, equipar y animar espacios públicos.
  • Fortalecer los programas de espacios públicos participativos.

19. Diversificar las inversiones en espacio público.

  • Crear programas escala menor de mejoramiento, limpieza e imagen de calles, barrios y caminos importantes, con participación (ampliando la línea de pavimentos participativos).

20. Se debe incentivar el uso del diseño urbano en el mejoramiento de calles y espacios públicos como estrategias efectivas y rentables para mejorar la calidad de vida en las ciudades.

  • Promover guías "Diseño Urbano" para la acción de los municipios y sector privado.
  • Modificar normativas (OGUC) relativa a estándares de áreas verdes, permitiendo mayor diversidad y opciones en el diseño de espacios públicos de los desarrollos inmobiliarios.

21. Incluir como criterio en los proyectos emblemáticos del Bicentenario la integración de espacios naturales con espacios construidos y la creación de espacios públicos e instalaciones adecuadas para la recreación, la cultura, el arte, el deporte

  • Convocar a concursos internacionales abiertos para proyectos urbanos del Bicentenario.

22. Privilegiar la integración de flora nativa a los espacios públicos urbanos, contribuyendo a su sustentabilidad.

  • Diseño de "Guías de Diseño Ambiental del Paisaje" para el uso por parte de municipios y desarrolladores inmobiliarios.

23. Promover el buen usos de la ciudad y los espacios comunes.

  • Invertir en publicidad y el desarrollo de campañas educativas.

2.2 COORDINACIÓN

24. Mejorar el acceso a información urbana para la toma de decisiones publicas y privadas.

  • Invertir en sistemas de información urbana (SIG) de acceso público.
  • Elaborar anualmente un informe sobre "Estado de la Ciudades Chilenas" con indicadores relevantes para la acción privada y la evaluación de la efectividad de las acciones públicas.

25. Mejorar la coordinación efectiva entre los distintos servicios vinculados al desarrollo urbano.

  • Establecer convenios de traspaso de información entre servicios.

2.3 INSTRUMENTOS

26. Perfeccionar el soporte jurídico de los Instrumentos de planificación.

  • Modificación de la actual Ley General de Urbanismo y Construcciones (LGUC)
  • Realización de modificaciones legales necesarias en la LGUC y otras leyes nacionales a fin de evitar contradicciones y conflictos.
  • Uniformar nomenclatura urbana entre las leyes.

27. Los Instrumentos de Planificación Territorial (IPT) deben estructurarse en un sistema integrado que permitan el manejo del territorio.

  • Mejorar y racionalizar la Circular DDU que coordina la elaboración de los IPT.

28. Perfeccionar, crear e implementar una más amplia gama de tipos de instrumentos de planificación y gestión

  • Planes de regulación ambiental
  • Planes de gestión urbana
  • Planes de infraestructura
  • Planes de capacidad urbana
  • Planes maestros de diseño urbano
  • Planes maestros de crecimiento urbano
  • Planes maestros espaciales
  • Planes flexibles para áreas de renovación urbana
  • Estudios de capacidad urbana como herramienta para la flexibilidad en desarrollo urbano
  • Perfeccionar planes regionales de desarrollo urbano (carácter legal, la utilidad y contenidos)

29. Orientar los nuevos instrumentos hacia mecanismos de planificación flexible.

  • Incorporar a la LGUC el concepto y los mecanismos de Planificación Flexible (Flexible Zoning, USA)
  • Revisar las instancias y normativas de aprobación de proyectos urbanos de impacto significativo para hacerlas mas transparentes y expeditas.
  • Perfeccionar y flexibilizar el instrumento Zoduc estableciendo condiciones para que un territorio sea Zoduc (por iniciativa pública o privada) y requerimientos del desarrollador para llevarla a cabo.
  • Definir formalmente una metodología para determinación de nuevas ZDUC.
  • Incorporar a la LGUC el sistema de Pagos por impacto (Impact Fees)

30. Promover y estimular el desarrollo urbano en las localizaciones con mayor potencial.

  • Revisar las instancias normativas de aprobación de proyectos urbanos para hacerlas más transparentes y expeditas
  • Exigir obras de urbanización a los proyectos de loteos en las áreas rurales
  • Garantizar las obras completas de urbanización como condición previa para otorgar el permiso de loteo y etapas en Zonas de Desarrollo Condicionado.
  • Establecer por Ley un mecanismo de coordinación entre municipios vecinos para la ejecución de inversiones en infraestructuras

31. Introducir normas flexibles de manejo ambiental que permitan a las industrias integrarse a las ciudades.

  • Establecer sistemas de emisiones transables.
  • Utilizar los fondos de innovación tecnológica y producción limpia (CORFO) con fines de integración urbana de actividades.

32. Simplificar planes reguladores comunales.

  • Modificación de la actual Ley General de Urbanismo y Construcciones.

33. Mejorar la normativa para facilitar cambios y transformaciones ágiles y rápidas en barrios, distritos y localidades pequeñas.

  • Modificación de la actual Ley General de Urbanismo y Construcciones.

34. Simplificar el trámite de aprobación de los IPT

  • Modificación de la actual Ley General de Urbanismo y Construcciones.
  • Apoyar la implementación de los planes reguladores en todo Chile.

35. Posibilitar la creación de áreas verdes y equipamientos de uso público en suelos en desuso.

  • Establecer convenio entre propietarios y el Estado para la utilización temporal de terrenos privados para fines de uso público.

2.4 INVERSIÓN PÚBLICA

36. La inversión pública debe ser estructurada a partir de planes desarrollo con referencias a unidades territoriales.

  • Reorganizar la estructura de asignación del gasto público a partir propuestas de desarrollo.
  • Elaborar bases para licitar vías interurbanas.
  • Elaborar proyectos de transporte público que operen como internalizadores de las externalidades provocadas por el transporte privado. Ejemplo: que se financien con fondos provenientes de un sistema de tarificación vial.

2.5 FORMACIÓN DE RECURSOS HUMANOS

37. El Estado debe hacer una fuerte inversión creación de capacidades técnicas y profesionales para el manejo del desarrollo urbano.

  • Aumentar los fondos para la investigación académica y artística aplicada en los temas de la ciudad.
  • Apoyar desde el Estado la formación de profesionales en temas de la ciudad.
  • Crear un programa de capacitación cuyo objetivo es la aplicación integral del modelo en todas las áreas que corresponda, de manera que se optimizar su utilización.

3. FINANCIAMIENTO DEL DESARROLLO URBANO Y TERRITORIAL

38. Mejorar el sistema de tributación a fin de asegurar que los aportes de las personas al financiamiento del desarrollo urbano sean justos y proporcionales a las necesidades.

Analizar y proponer modificaciones a la actual manera en que los impuestos se relacionan al desarrollo urbano:

  • Ligar los impuestos generales de la Nación con los servicios entregados, haciendo explícito los beneficios.
  • Incluir mecanismos de incentivo tributario al desarrollo urbano como la liberalización de impuestos o compensaciones de otro tipo (aumentar la capacidad de constructibilidad, por ejemplo) para: La localización de industrias y servicios (patentes comerciales), remodelación, mantención de patrimonio y áreas verdes (Ej. Descuento del dividendo de la casa del impuesto a la renta existente en EEUU), clasificar la renovación como inversión en vez de gasto para así poder descontarla del pago de impuestos.
  • Revisar propuesta de SII sobre sitios eriazos y obras abandonadas con el objetivo de evitar excesivos gravámenes.
  • Modificación de la Ley de Municipalidades para entregar más autonomía en la fijación o reducción de impuestos territoriales y pagos de mejoramiento urbano.
  • Fortalecer los mecanismos de redistribución de fondos municipales.

39. Crear nuevos mecanismos de incentivo para allegar recursos para la atracción de inversión privada y municipal.

  • Establecer "Cobros de Mejoramiento Urbano" por distritos. (LGUC)
  • Creación de "Distritos de Mejoramiento", permitiendo a las autoridades locales establecer convenios con el sector privado. (LGUC)
  • Creación de "Zonas Comerciales de Mejoramiento" a cargo del sector privado comercial de la zona (modelo "Business Improvement District" USA)
  • Crear créditos especiales para el reciclaje de zonas industriales obsoletas y renovación de edificios en deterioro en las zonas consolidadas de las ciudades.
  • Ley de donaciones para el desarrollo urbano.
  • Establecer bonificaciones de constructibilidad y densidad como incentivos a la inversión en obras de beneficio público. (LGUC)

40. Facilitar el funcionamiento de corporaciones para el desarrollo urbano.

  • Proyecto de Ley para corporaciones municipales.
  • Legalización y creación de las Corporaciones de Infraestructura y Desarrollo Urbano.

41. Extender la herramienta de las concesiones a áreas verdes, vías urbanas, equipamientos urbanos, etc.

  • Definir las condiciones y mecanismos necesarios para extender el campo de acción de las concesiones a obras no viales.
  • Aprobar el proyecto de Ley sobre Financiamiento Compartido del Minvu.

42. Promover la participación y la competencia en la generación de proyectos urbanos.

  • Creación de "Fondos Concursables de Desarrollo Urbano" a través de un claro sistema de puntaje.
  • Creación de tres fondos para escalas y tipos distintos de proyectos y planes: Regionales, locales y por distritos.
  • Para consolidar esta iniciativa y entregarle más posibilidades, crear la Ley de Fondos Concursables.

4. MANEJO AMBIENTAL DE LA CIUDAD Y EL TERRITORIO

43. Incorporar la variable medio ambiental a la política de desarrollo urbano.

  • Desarrollar mecanismos para la certificación ambiental de los Instrumentos de Planificación Territorial, permitiendo reducir los plazos y procedimientos para ala aprobación de proyectos y obras de infraestructura.
  • Mejorar el Plan de reducción de emisiones de gases y polvo mediante un adecuado programa de pavimentación y mejoramiento de los combustibles.
  • Cobro a las fuentes fijas productivas que emiten contaminantes.
  • Incorporar mecanismos de mercado que permitan transar los derechos efectivos de emisión, flexibilizando las normas actuales.

44. Fomentar la inversión en proyectos de recuperación ambiental en las ciudades.

  • Promover un desarrollo y preservación de áreas verdes forestadas vinculadas a las ciudades y sus áreas rurales
  • Implementar plan de recuperación y creación de áreas verdes en pozos de áridos, vertederos y suelos deteriorados por actividades extractivas.
  • Implementar planes y proyectos de "Recuperación de Áreas Verdes" a interior de las ciudades en el marco del Plan Bicentenario.
  • Desarrollo de corredores verdes en la periferia de las ciudades.

45. Integrar la dimensión ambiental en el diseño de proyectos urbanos e inversiones inmobiliarias.

  • Incorporar al desarrollo urbano en suelos agrícolas normativas más exigentes en cuanto al diseño y requerimiento de áreas verdes.
  • Recuperar con proyectos urbanos o con creación áreas o corredores verdes terrenos abandonados, obsoletos o en terrenos de empresas del estado.

46. Reducir los niveles de segregación socio-espacial en las ciudades.

  • Incorporar a los programas habitacionales los costos ambientales creados por la segregación espacial de los proyectos de vivienda pública.
  • Fortalecer los mecanismos de movilidad habitacional.

47. Abordar el tema de la pobreza urbana como un generador de impacto ambiental.

  • Priorizar las inversiones públicas de infraestructura en las zonas más deprimidas y pobres (pavimentación alcantarillado, parques urbanos, aguas lluvias, recuperación zonas contaminadas, etc.)

48. Desarrollar políticas que incentiven el reciclaje de residuos sólidos a nivel comunal.

  • Crear incentivos de precios es el tema de la disposición de residuos sólidos, perfeccionando los cobros municipales por disposición de basura.

5. CIUDADANÍA Y PARTICIPACIÓN EN EL DESARROLLO URBANO Y TERRITORIAL

49. Incentivar a la participación local en el desarrollo urbano.

  • Perfeccionar el sistema de participación ciudadana en la elaboración y aprobación de los Planes Reguladores Comunales.
  • Crear un mecanismo de participación permanente de los vecinos en las decisiones de inversión urbana y aprobación de proyectos en el ámbito comunal. (Impulsar consultas y plebiscitos comunales)
  • Implementación de fondos concursables de renovación urbana de barrios.
  • Crear créditos especiales para ONGs vinculadas a proyectos participativos de desarrollo urbano.
  • Incorporar fuertemente Internet a los procesos de difusión y participación urbana.
  • Crear estaciones de diálogo en los municipios. Se puede aprovecharla infraestructura de los Infocentros del Ministerio de Educación.

50. Apoyar desde el Estado la difusión y capacitación en temas urbanos a todo nivel.

  • Financiar programas de estudio e investigación en temas urbanos en centros de estudio superior.
  • Apoyar y fortalecer los el "Programa de Diálogos Ciudadanos" a lo largo de todo Chile.
  • Crear programas (Software) con contenidos urbanos para la difusión y formación.
  • Difusión de las experiencias exitosas en desarrollo urbano y participación en Chile (edición de folletos MINVU)
  • Crear programas de formación para líderes locales.

51. Generar identificación afectiva del habitante con el barrio y la ciudad.

  • Generar proyecto participativo de recuperación de memoria colectiva de los barrios.
  • Convocar concurso de "Mejores Practicas" en participación e identidad local.
  • Apoyar campañas de comunicación sobre la identidad local de cada barrio (Ej. Guía de los Barrios de Chile)
  • Programa de financiamiento de actividades culturales y de encuentro en barrios.

52. Fomentar mecanismos de control ciudadano sobre el desarrollo urbano.

  • Crear Defensor del pueblo a nivel municipal y regional.
  • Crear ordenanza local de participación ciudadana

53. Fortalecer liderazgo local en materias de desarrollo urbano.

  • Apoyar la gestión y capacitación de organizaciones sociales vecinales, por ejemplo, impartiendo talleres de capacitación en temas urbanos.
  • Plan de apoyo a municipios. Crear convenios con instituciones privadas y alianzas con otras instituciones públicas para llevarlo a cabo.
  • Brindar asesoría técnica a organizaciones vecinales, acceso mediante postulaciones o concursos.

54. Incentivar la acción directa de las personas en el desarrollo urbano.

  • Desarrollar Programas de voluntariado orientado a la mantención, mejoramiento y construcción del espacio público (Ej. Colegios, empresas, grupos organizados, etc.)

 

IV.- Gestión del Plan de la Reforma Urbana y territorial.

Plantear las acciones del plan de reforma en el contexto de iniciativas sectoriales para el mejoramiento de la gestión es una cosa. Ampliar el alcance de estas iniciativas para transformarse en un lineamiento gubernamental es otra. La progresiva modernización de la gestión urbana, y de la posición que ocupa la ciudad en el desarrollo nacional sugiere plantear las acciones en el marco de un Plan de mayor alcance: La Reforma Urbana y Territorial.

Se sostiene ello en la comprensión de que el sistema de asentamientos humanos constituye una preocupación saliente en las estrategias del desarrollo nacional en sus dimensiones económica, social y ambiental, así como en la importancia que tiene el incorporar diferentes servicios públicos al tema.

Por ello, la atención sistemática de la complejidad del fenómeno de los asentamientos humanos y su inherente proceso de consolidación forma ya parte de los objetivos del Plan de Gobierno.

La visión de la ciudad como un medio para el desarrollo social, como vehículo para la superación de la pobreza, como soporte a las acciones del crecimiento económico, como plataforma para la competitividad internacional e inserción nacional en el contexto global, y otras concepciones de similar tenor, obligan a desarrollar un esfuerzo sostenido y sistemático con relación a la modernización y actualización de los medios e instrumentos de la gestión urbana.

Obliga asimismo a la incorporación de nuevos recursos a la gestión del desarrollo urbano, a la integración de los componentes espaciales en la definición y ejecución de políticas públicas, y al tratamiento de la problemática de los asentamientos con criterios de mayor complejidad, incorporándole planteamientos estratégicos a su desarrollo, por sobre el tradicional enfoque normativo- administrativo, y del rol público como el ejecutor de planes, programas y proyectos de inversión sectorial, enfocados en la superación de carencias básicas.

La oportunidad que para el acelerado y sostenido crecimiento nacional representa nuestro sistema urbano con sus actuales niveles de organización y satisfacción de necesidades básicas, no pueden ser minimizadas. Claramente nuestro sistema urbano ha alcanzado un nivel de desarrollo que nos permite plantear con seguridad un segundo plano de desafíos: el de elevar la calidad de vida de nuestras ciudades. En este plano los elementos asociados con mejorados estándares de servicio, con nuevos niveles de diversidad y complejidad, con una renovada y vital relación con el sistema natural de soporte, con una efectiva incorporación de la población y el sector privado en la gestión y desarrollo de las ciudades, con el mercado, con nuevas concepciones y relaciones entre los tradicionales sectores, en particular vivienda, infraestructura y transporte, y otras similares, son todas expresiones de este anhelo.

Desde este punto de vista, los planteamientos de principios, líneas de acción, recomendaciones y acciones que en el marco del GTRC han surgido apuntan en el agregado a la definición de un estilo y enfoque de gestión consecuente con esta visión. La materialización ordenada de las acciones exige la definición de marcos presupuestarios, de la selección de los roles que corresponden a cada repartición en este esfuerzo de modernización, y de la estructuración de un sistema de seguimiento y evaluación permanente.

Estructura para la gestión del Plan de la Reforma Urbana.

A. La Presidencia de la República ha ya definido la prioridad que asigna al mejoramiento formal de nuestras ciudades. Planteó asimismo un programa específico de inversiones orientadas a dotar a ciudades seleccionadas del país de proyectos emblemáticos del Bicentenario de la Independencia, fijando con ello un marco temporal para la materialización de estas inversiones. En lo principal relacionadas con la dotación de espacios públicos y equipamiento emblemático, la cartera de proyectos se encuentra en fase de preparación y evaluación para ser incorporados a los marcos presupuestarios de los próximos años.

En la preparación de estos proyectos se han seleccionado temas urbanos contemporáneos (bordes costeros, renovación de áreas centrales, sistemas principales de espacios públicos), y en su elaboración se ha definido la necesidad de dotar a estas iniciativas de marcos institucionales específicos, de modalidades de financiamiento ad-hoc, así como la de incorporar activamente procesos participativos y de integración del sector privado a su materialización. También es evidente la oportunidad de tratar estos proyectos con un sentido estratégico en relación con el desarrollo de las ciudades que los contienen, aspecto que les otorga un gran interés en cuanto ilustraciones del nuevo estilo de gestión urbana a la que aspira la Reforma.

B. Del mismo modo la Presidencia ha solicitado la preparación de un sistema de acciones encaminadas a la gradual mejoría cualitativa de nuestras ciudades, lo que a la fecha se ha traducido en: la preparación de un nuevo proyecto de Ley General de Urbanismo y Construcciones; la tramitación de la nueva Ordenanza General de Urbanismo y Construcciones; un renovado impulso a las inversiones regionales en desarrollo urbano; el esfuerzo de integración de las decisiones de inversión en sistemas de transporte y vialidad con las estrategias de desarrollo y extensión urbana; la gestión y materialización de inversiones sectoriales en proyectos estructuradores de espacios públicos y parques; la continuidad de programas de renovación urbana; la voluntad de impulsar efectivamente los programas de densificación residencial en las grandes áreas urbanas, y; apuntar gradualmente a la complementariedad entre las políticas habitacionales y las de desarrollo urbano.

C. En los aspectos institucionales, la fusión de los Ministerios de Vivienda con el de Bienes Nacionales, ciertamente que encierra un gran potencial para la modernización y agilización de la administración del territorio como soporte para el desarrollo. Las modificaciones legales introducidas a la Ley de Municipalidades, de Gobiernos Regionales, y otras dan cuenta del objetivo de seguir avanzando en la descentralización de la gestión del desarrollo territorial. La dimensión ambiental y de la sustentabilidad en la temática del desarrollo urbano y territorial ocupa hoy día un lugar destacado.

D. Las acciones anteriores dan cuenta de un proceso sostenido de modernizaciones que hacen a los procesos de toma de decisiones y de acción en el territorio. Junto a ello, el medio nacional, marcado por la necesidad de acelerar las inversiones, por la aspiración ciudadana a mayores grados de flexibilidad para el emprendimiento de acciones de desarrollo urbano, por el aumento en las aspiraciones de la población con relación a niveles de servicio, y, por la toma de conciencia del rol promotor que le cabe al Estado en estas materias, aconsejan, avanzar mas en las líneas precedentes.

E. Para ello, la organización del "Grupo de Trabajo para la Reforma Urbana", encabezado y liderado por el Ministerio de la Vivienda y Urbanismo, dio forma a un proceso participativo de informantes claves que, en distintos temas, reflexionó en torno a problemas y propuestas para mejorar el proceso de desarrollo urbano nacional, en documentos de trabajo, documentos de posición, actas, resúmenes, transcripciones y otros se da cuenta de la riqueza y complejidad de la temática abordada. El Plan de la Reforma Urbana, elaborado a partir de estos productos, apunta a traducir éstas en una propuesta gubernamental de alcance multisectorial, emblemática del esfuerzo de modernización sectorial, el que se constituye en la principal herramienta de gestión.

F. La implementación y gestión del Plan de Reforma Urbana y Territorial requiere, en términos generales de:

    • Una directriz y compromiso presidencial claros, expresados en la definición del Plan de Reforma Urbana y Territorial como línea de acción gubernamental.
    • La conformación de un equipo de trabajo especial, que asuma el desarrollo de las distintas componentes del Plan de Reforma.
    • Un mecanismo para la programación, seguimiento y evaluación de los avances en la materia.

    • Financiamiento especial del proceso de implementación del Plan de Reforma Urbana.
    • Modalidades específicas para la incorporación de la Reforma Urbana en la acción en los niveles regional y municipal.

 

En consecuencia, la materialización del Plan de Reforma Urbana y Territorial recomienda las siguiente organización para la gestión de esta iniciativa gubernamental:

  1. La instauración una autoridad clara o Directorio de la Reforma en representación de la Presidencia, con expresión a nivel central y regional, conformada por representantes del sector público, privado, local y profesional.
  2. La creación de un Grupo de Trabajo o Secretaria Ejecutiva permanente para el desarrollo de las recomendaciones de la Reforma, bajo la tuición del Ministro de la Vivienda y Urbanismo en representación del Presidente de la República.
  3. El perfeccionamiento de las líneas de acción del Plan de Reforma Urbana, en asociación con proyectos, planes y programas estratégicos y/o en acuerdo con las condiciones especificas de cada asentamiento o región, relacionándolas con las políticas sectoriales vigentes y propuestas.
  4. Financiamiento especial para los costos asociados al proceso de reforma, (estudios y otros) así como para las inversiones o financiamiento de los diferentes programas y proyectos que de allí deriven.
  5. El fomento a la concertación regional y local de actores público y privados para el desarrollo de la Reforma Urbana, mediante el financiamiento un intensivo "Programa de implementación de nuevos Planes Reguladores de Desarrollo Urbano y Territorial" en todas las Regiones, Intercomunas y Comunas de Chile antes del 2005.
  6. La implementación de un "Plan de Socialización de la Reforma Urbana", que apunte a la comunicación efectiva con la comunidad en relación a las propuestas y proyectos derivados del proceso de reforma urbana, utilizando para ello el sistema de servicios públicos, medios de prensa, colegios profesionales, etc.
  7. La creación de un "Programa Especial de Proyectos Concursables de Desarrollo Urbano", que fomente a través de las programas sectoriales existentes, proyectos especiales que contribuyan al fomento de los principios de la reforma, al esclarecimiento de las oportunidades locales y la superación de las dificultades que en el proceso de materialización de las distintas medidas.
  8. Interacción con el Poder Legislativo para la preparación, estudio y aprobación de modificaciones legales y normativas que se requieran.
  9. Auspiciar la preparación de material bibliográfico y de difusión audiovisual de los avances de la Reforma, como medio de registro, internalización y diseminación de los resultados.
  10. Fomentar mediante recursos especiales o regímenes de excepción administrativa la iniciativa regional y sectorial en la implementación de la Reforma como medio de aceleración de la adopción de las recomendaciones de la Reforma. ( Por ejemplo, la reforma judicial tiene dos regiones piloto).

________________________